Cuando algo se nos antoja distinto, nos llama tanto la atención que hace que todo se detenga, sin duda lo mejor es eso, detenerse y disfrutarlo. Hay que saborear los intantes.Besos.
Hay que disfrutarlo y no intentar entenderlo.
Ese coche, ese cuatro-cuatro, el de la izquierda, podría ser el mio. Saltibrincos
Si sabía te iba a saludar!
Algunas cosas mejor no cuestionarlas, por miedo a perderlas más que por cualquier otra razón.Suerte.J.
Generalmente cuando uno racionaliza algo, deja de ser mágico.
Sería un placer saber qué pensás sobre lo que acabás de leer.
Cuando algo se nos antoja distinto, nos llama tanto la atención que hace que todo se detenga, sin duda lo mejor es eso, detenerse y disfrutarlo. Hay que saborear los intantes.
ResponderEliminarBesos.
Hay que disfrutarlo y no intentar entenderlo.
EliminarEse coche, ese cuatro-cuatro, el de la izquierda, podría ser el mio. Saltibrincos
ResponderEliminarSi sabía te iba a saludar!
EliminarAlgunas cosas mejor no cuestionarlas, por miedo a perderlas más que por cualquier otra razón.
ResponderEliminarSuerte.
J.
Generalmente cuando uno racionaliza algo, deja de ser mágico.
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